Situado en un barrio en las afueras de la ciudad, el proyecto del arquitecto Alejandro Szilak se posa sobre el terreno hasta los límites establecidos por las normativas de los retiros y de superficies, creando un rectángulo de 107 m2 cubiertos en planta baja, y 32 m2 en planta alta.

La casa VM2 consta de un núcleo central de servicios, planeando sobre su perímetro la ubicación de las funciones primarias, y logrando de esta manera, la libre circulación sobre la totalidad de su borde. Las decisiones proyectuales de la vivienda estuvieron basadas en la premisa de una construcción rápida y ordenada; pensando los problemas de la obra de acuerdo a las posibilidades técnicas del lugar. Así se opta por una construcción en seco, la cual, mediante una estructura de pórticos metálicos modulados, no sólo crea un ordenamiento estructural, sino también, le brinda flexibilidad a la planta. Dicha regularidad estructural, permitió utilizar componentes constructivos y elementos auxiliares del modo más racional posible, reduciendo la diversidad y resolviendo, con cuatro tipos de tubos estructurales, ese detalle constructivo de la obra.

La estructura metálica permanece recubierta exteriormente en sus caras laterales mediante una piel de chapa opaca ventilada, mientras que, hacia el frente y contrafrente, se resuelven mediante carpinterías con vanos transparentes o ciegos, según la necesidad del espacio al cual se orientan. La flexibilidad de las fachadas norte-sur permiten que la casa ventile de manera cruzada en todos sus ambientes, creando una búsqueda de confort térmico y ahorro energético. La visibilidad obtenida en la vivienda, es concebida a través de un sistema de construcción preciso y ordenado, donde las distancias entre columnas definen un módulo básico, dominante de la forma resultante, donde el lenguaje se deduce de una arquitectura discreta y rigurosa, logrando de esa manera, una relación unívoca entre orden visual y sistema constructivo.

 

Ficha Técnica:

 

Obra: Casa VM2.

Ubicación: UF 75, Finca Villa Muluen, Plottier, Neuquén, Argentina.

Proyecto: Arq. Alejandro Szilak.

Colaboradora: Arq. Adriana Bongiovani.

Superficie: 139 m2.

Fotografía: Maju Franzan.

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